¿Guadalajara existe? Sí, y está a media hora de Madrid.
¿Y se come bien? Pues para ser una ciudad de paso o «ciudad dormitorio», la oferta gastronómica no está ni tan mal.
El mejor restaurante es el Amparito Roca, y tras el cambio de dueño de Los Faroles, el segundo mejor es el restaurante Las Llaves, situado en la plaza de Marchamalo -un pueblo o extensión de Guadalajara, a cinco minutos del centro- que es del que ahora os hablo.
Las Llaves ocupa una casona antigua con varios salones. Es un sitio acogedor.
La cocina que ofrecen es «sensata y sin artificios», o por si hay alguien de Burgos, una cocina tradicional: guisos, buena carne y buenos postres.
Una de sus especialidades son las manitas, que me encantan. Aquí las prepararan de cerdo, deshuesadas, y están espectaculares.
Muy buena también la presa ibérica con cuscús que tenían como plato del día.
De postre, el brownie de chocolate está espectacular.
Ofrecen medias raciones y tercios de casi todo los platos lo cual es perfecto para probar muchas cosas, sobre todo de entrantes, donde destacan las croquetas de setas o las colmenillas a la crema con foie.
La relación calidad precio es inmejorable pues difícilmente vas a pagar más de 35 euros por barba.
Para repetir. Ideal incluso para acercarse un sábado o domingo a comer desde Madrid, con amigos, con pareja o con la familia.
Dirección:
- Plaza Mayor 16, 19180 Marchamalo, Guadalajara
- 949 25 04 85
- http://www.lasllaves.es/
Yo pagué: 35€ | Precio medio: 35€
Fecha de la visita: 2014