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Pierre Gagnaire fue mi primera visita a un restaurante de nivelón en París, así que los nervios y las expectativas eran muy altas.

En primer lugar diré que me decidí por Pierre Gagnaire tras analizar y leer mucho sobre los restaurantes parisinos, y teniendo en cuenta que en algunos como L’Astrance o Thoumieux no había sitio desde hace meses.

Gaganarie es un cocinero de siempre, de los grandes de Francia, junto a otros como Michel Brass, Alain Ducasse, Joel Robuchon, Alain Chapel, etc.

Durante mucho tiempo estuvo su restaurante en un pueblo al sur de Francia, y allí recibió la visita de un joven Ferrán Adriá allá por los años 80. Por la influencia, entre otros, de Gagnaire siempre se ha dicho que la cocina de Adriá tiene un origen francés, algo que el propio Ferrán siempre ha reconocido.

En cuanto al restaurante en sí, situado en la Rue Balzac (al lado del Arco del Triunfo) hay que destacar el magnífico comedor, clásico, elegante, con unos manteles y una cubertería de diez.

El ambiente es muy elegante pero totalmente distinto al que te puedes encontrar en un tres estrellas de España, dando la impresión de que los clientes eran habituales. Ni siquiera sale Pierre a saludar y a preguntar qué tal. Todo fluye con absoluta normalidad.

La carta es amplia y el menú degustación de primavera (por el que optamos) está compuesto de platos muy clásicos, donde prima el producto, nada sofisticados y raciones abundantes: espárrago verde con salsa holandesa, ñoquis con salsa de foie, mero con gambas de Palamós o los filetes de pato son platos, como digo, muy puros y sencillos a la vista, y con un sabor sobresaliente.

De beber elegimos un Champagne, Joseph Perrier de 2002, fino, elegante, de matrícula de honor.

Los postres muy flojos, con sabores más ácidos que dulces, pero en conjunto la cena fue excelente.

Precio del menú: 265 euros por persona. Yo creo que en Madrid con ese precio no lo llenaban nunca, pero París es otra historia…

Dirección:

Web:

Yo pagué: 265€ | Precio medio: 265€

Fecha de la visita: 2011