Juanjo, el excelente cocinero que dirige La Tasquita de Enfrente -uno de los mejores restaurantes de Madrid- acaba de abrir en el local contiguo un bar de bocatas.
Son bocatas de toda la vida, “bocatas madre” los llama él, así que no te esperes baos de panceta ni demás platos de cocina fusión asiática que tan de moda están y que son más propios de Nakeima o Chuka.
El punto fuerte es que son bocatas clásicos pero hechos con ingredientes de primera calidad y esto es lo que distingue al Porrón Canalla de otros sitios de bocatas más de batalla típicos de las seis de la mañana cuando es mejor comerse un bacon queso de mierda que zamparse al orco de la discoteca.
El punto débil es que hay a quien le pueden resultar algo aburridos, muy clásicos, e incluso consideren que alguno de estos bocatas se lo puede hacer uno mismo en casa sin mayor complicación (el de mejillones no deja de ser un mollete con 2 mejillones de lata Frinsa y 2 patatas fritas) y eso implique que el peregrinaje hasta allí no les merezca la pena o por ejemplo prefieran los bocatas de Panic, más originales.
En el Porrón Canalla ya explican que son bocatas de toda la vida pero debido a este boom gastronómico que estamos viviendo -y que acabará explotando-, hay quien pueda echar en falta más originalidad. Yo en cambio creo que es bueno que a veces alguien nos recuerde lo clásico y dejemos por un momento de lado tanta fusión y paripé.
Otro punto débil, este más objetivo, es que abre a partir de las 18:00 por lo que los bocatas son para merendar o cenar y no para comer. Eso sí, cierra a las 00:30 y findes 01:30.
El local se encuentra en la misma calle Ballesta, una zona que, aunque se va reformando, sigue teniendo a prostitutas de 60 años sentadas en los portales esperando que pase un viejo verde o un joven depravado.
La decoración es casi inexistente, con las propias paredes de cemento rotas, como si estuviese abandonado. Es curioso que en ocasiones hoy en día la propia falta de decoración sea precisamente la decoración. Se consigue así dar ese toque canalla.
Los techos son altos y las mesas, de madera, son corridas –para compartir-. Hay también una mesa alta.
La luz es bastante fuerte lo que consigue que la gente que pase por la calle se fije en el bar.
Creo que para el concepto que quieren ofrecer, es perfecta la decoración.
Los bocatas son hechos con pan de la panadería Viena La Baguette y ofrecen tres tipos de panes: la barrita, bastón y mollete.
El bocata individual, barrita, está entre los 3 y los 6 Euros. El bastón, para compartir, cuesta 10-12 Euros, y el mollete, utilizado para mejillones con patatas fritas, y que sale a 5 Euros, o para el postre relleno de chocolate con aceite y sal (5€).
Para beber, lo divertido es pedirse el porrón de cerveza que sale a 4€ (el equivalente a 3 cañas) o a 6€ (4 cañas). Curiosos estos números pues haciendo cuentas siempre saldrá más barato pedir porrones de 4€ que de 6. También hay porrones de tinto de verano, de vino blanco o tinto y de manzanilla.
Cuidado al beber del porrón que si no tienes práctica te echarás la cerveza encima.
En general los precios me parecen económicos si tenemos en cuenta la buena calidad del producto aunque al no dejar de ser bocatas clásicos, a muchos les puede resutar algo caro ya que 15-20€ es un precio medio aquí.
En mi primera toma de contacto, entre dos, probamos:
2 barritas artesanas de tortilla francesa con pimientos verdes (3€ cada una). Muy bueno y bien jugosito.
1 bastón de lomo queso con pimiento verde y queso (10€). Del bastón salen 4 trozos. Cojonudo. El mejor.
1 mollete de mejillones en escabeche (Frinsa) con patatas fritas (5€). La típica tapa hecha bocata. El mollete, más tierno, le va perfecto. Rico.
1 barrita de calamares con ralladura de lima (4€). Me resultó algo seco, deberían añadirle más salsa.
1 barrita de pepito de ternera con salsa brava (5€). Muy rico.
Con 2 porrones de cerveza, salimos a 38€, 19€ por barba que creo que será el precio medio ya que 3 barritas se toma uno perfectamente, más cerveza…20€ fácil.
Me ha gustado mucho y es una opción perfecta si andas de compras por Gran Vía o quieres tomar algo rápido para luego ir al cine o teatro. Infinitamente mejor que gastarte 10€ en el burrikin.
Dirección: Calle Ballesta, 2
Yo pagué: 20€ | Precio medio: 20€
Fecha de la visita: Junio 2015