Está en Viesques donde la mejor opción es el Medio Lleno, un restaurante que me encanta y que tiene tanto éxito que los fines de semana se llena a niveles de tener que esperar una hora para que te den mesa, y es que el dueño se puede permitir el lujo de no aceptar reservas.
Como el Medio Lleno estaba lleno, nunca mejor dicho, nos recomendaron un restaurante que está al lado : EL PERRO QUE FUMA (vaya nombrecito).
El perro que fuma por dentro es un restaurante bastante formal y muy acogedor mientras que fuera tiene unas mesas altas para picoteo así que aquí nos sentamos.
De primero, tomamos unas croquetas de bogavante (15 €) que estaban malísimas. Eran absolutos mazacotes empalagosos que no sabían a bogavante por ningún lado.
También tomamos la mini hamburguesa de atún (12,40 €) que estaba simplemente correcta.
De segundo, unos ricos tallarines con setas (15 €) y una muy buena paletilla de lechazo (21 €). Estos dos platos son de la carta del restaurante pero pedimos que nos los sirvieran en las mesas de picoteo.
Sin postre, y con copas de vino, salimos a 36 € por barba.
Sea dentro (50 €) o fuera (25 €), el sitio creo que merece la pena si vives por la zona.
Dirección:
- Poeta Ángel González Muñiz 18, bajo, Gijón
- 984 19 34 93
- http://www.elperroquefuma.com/
Yo pagué: 25€ | Precio medio: 25-50€
Fecha de la visita: 2013