Gerona

ELS BRANCS

Este pasado sábado 29 de junio tenía mesa para cenar por tercera vez en EL CELLER DE CAN ROCA. En cada una de estas tres visitas a Gerona, me surgía siempre la misma pregunta ¿cómo voy desde Madrid hasta Gerona? ¿Cómo aprovecho el fin de semana? Pues bien, en la crítica del CELLER os contaré mis planes en las dos primeras visitas mientras que aquí os cuento mi plan para esta tercera vez (si no os interesa el plan, podéis ir directamente más abajo a CRÍTICA DE ELS BRANCS).

Debido a que ya estamos en verano y que seguramente iba a hacer buen tiempo por la Costa Brava, decidí aprovechar el viernes yendo a cenar a algún buen restaurante que estuviera en la playa y tuviera terraza.

La primera opción fue MIRAMAR, 2 estrellas, y del que me han hablado maravillas. Sin embargo, al llamar para reservar me dijeron que ese viernes 28 de junio por la noche cerraba por un evento.

Volví entonces a indagar por internet, a revisar los restaurantes con estrella por Gerona y entonces de repente me apareció una foto de ELS BRANCS. La foto era de una terraza al borde del mar con unas mesas desde las que se observaba todo el Mediterráneo. Me enamoré de esa imagen y llamé al momento (principios de junio) para reservar, asegurándome que tendría una mesa justo al borde del mar.

Hay muy pocas referencias sobre ELS BRANCS en internet, siendo la única fiable la de la web observación gastronómica.

ELS BRANCS está en Roses, un pueblo costero a 70 kms al norte de Gerona y a….750 kms de Madrid!!!

Desde que incomprensiblemente no hay avión de Madrid a Gerona, la única forma de ir a Roses es en coche o en AVE a Gerona y luego alquilar un coche. Pues bien, el AVE a Gerona, con un mes de antelación, costaba 180 € i/v (yendo de viernes a domingo con buen horario) y encima tarda 4 horas. Si multiplicas 180 € por 2 personas y le sumas al menos unos 60 € de alquiler de coche, el viaje a Roses te cuesta mínimo 420 €.

Decidí entonces, con 2 cojones, ir en coche hasta Roses. Yo salgo de currar los viernes a las 3 y mi objetivo era llegar a ELS BRANCS cuando todavía hubiera algo de luz, es decir, 21:30.

Pues bien, saliendo a las 15:15 de Madrid, yendo por las AP2 y AP7 (43 € en peajes) y parando solo una vez para echar 60 € de gasolina, en 6 horas y 15 minutos llegamos a ELS BRANCS.

CRÍTICA DE ELS BRANCS

El restaurante ELS BRANCS se encuentra dentro del precioso Hotel Vistabella, el único 5 estrellas de Roses.

ELS BRANCS recibió en 2012 su primera estrella michelín y eso, por mucho que algunos cocineros se empeñen en no reconocer, te coloca en el mundo gastronómico y te abre a muchísimos clientes que si no fuera por la estrella quizás nunca irían.

ELS BRANCS solo abre por las noches y 6 meses al año.

El restaurante es todo él un espacio abierto completamente al Mar Mediterráneo. Por tanto, las vistas son espectaculares. Me recordó un poco a BENS D’AVAL, un restaurante en Mallorca que tiene una terraza parecida (aunque con mejores vistas pues está en un acantilado sin nada alrededor).

Hay que puntualizar que no todas las mesas son iguales. Las 2 mejores mesas son las que están justo en la barandilla, al borde del mar. Suelen ser mesas de 2 (para parejas). Yo había pedido una mesa de esas y me garantizaron que me la darían. Sin embargo, al llegar nos dieron una mesa en “segunda línea”. Debo reconocer que de primeras me cabreé mucho y debí haberles dicho algo pero pronto me di cuenta que mi mesa era mejor. Pese a estar en “segunda línea”, estaba colocada en el centro de la terraza y las vistas eran igualmente preciosas. Además, y esto es lo más importante, estaba más resguardada del viento y del frescor que provoca el mar. De hecho, las parejas de guiris (el 80% de los clientes eran guiris) que estaban en primera línea tuvieron que pedir mantas y además les soplaba el viento de lo lindo.

Conclusión de qué mesa pedir: si va a hacer una noche de calor, sin viento (quizás algo que solo ocurra en julio-agosto), debes pedir una de las dos mesas de “primera línea”. Pero como uno al hacer la reserva nunca sabe qué tiempo va a hacer el día concreto de la cena, tienes dos opciones: o jugártela y pedir una mesa en “primera línea” o pedir una mesa central en “segunda línea” pero lo más cerca posible de la barandilla. Lo que creo que nunca debes aceptar es una mesa en lateral de segunda línea o ya en tercera línea. Joder parece que estoy explicando cómo comprar unas entradas para el Circo del Sol pero es que os aseguro que es muy importante el elegir una buena mesa, y como nadie habla sobre estas cosas en internet, creo que esta información que doy es muy útil para aquellos que vayan por primera vez a ELS BRANCS. Por cierto, tienen aparcacoches.

Respecto al servicio de sala, hay que decir que es perfecto con mención especial al jefe de sala Eric, un tipo que nos trató de maravilla. Como único fallo mencionaría que el sumiller de vinos echó bomba de humo en medio de la cena y desapareció, y como el vino lo colocan lejos del comensal, tenía que levantarme a servirme yo el vino (qué manía tienen todos los restaurantes con poner el vino lejos del alcance del cliente; eso solo se puede hacer si tienes un camarero pendiente de ti al 100% que te rellena la copa cada vez que la vacías porque de lo contario pasan estas cosas, que quieres vino, la botella está lejos y nadie te la sirve).

Como este viernes 28 de junio solo había 5 mesas cenando, teníamos muchísimos camareros para nosotros. Hay que reconocer que hasta nos impresionó y dio cierto palo el entrar en el restaurante pues yo solo veía camareros de pie por todos lados que nos observaban entrar…

Respecto a la comida, en ELS BRANCS puedes cenar de carta, o puedes elegir el Menú Degustación a 64 € y que varía continuamente, o puedes elegir el Menú Experiencias que cuesta 147 Eurazos. Joder, para ser 1 estrella michelín no muy conocido, hay que reconocer que el Menú Experiencias es caro de cojones. Es más, yo que he estado en todos los 3 estrellas de España, en casi todos los 2 y en muchísimos de 1 estrella, os puedo asegurar que es el restaurante de 1 estrella con el menú degustación más caro. Por ejemplo, el Menú largo de DiverXo (2 estrellas) cuesta 165€, el de Aponiente (1 estrella) cuesta 110 €, y el del Celler de Can Roca (mejor restaurante del mundo) cuesta 169 €, es decir, solo 20 € más!! ¿Estamos locos?.

Si bien el Menú de 64 € puede ser una muy buena opción para probar la cocina de Javier Cabrera, ya sabéis que yo a todos los restaurantes que voy por primera vez, siempre pido el menú más largo.

El Menú Experiencias consta de 18 platos y os aseguro que es una absoluta bomba. Posiblemente, sea de los menús que más me han llenado en mi vida, y eso que estoy acostumbrado a meterme menús largos y que el día del ELS BRANCS apenas había comido.

Y es que el fallo es el ritmo, demasiado rápido para mi gusto. Durante 3 horas no paran de traerte platos y eso agota. Yo sin duda que haría el menú más pausado aunque eso implicara una hora más de duración. Aquí se viene a disfrutar, sin prisas.

El menú empieza con una margarita preparada con nitrógeno que estaba muy buena y sirve para refrescar la boca.

A partir de ahí, lo dicho, empiezan a traer sin parar platos y más platos, algunos que son simple bocados y otros que son más contundentes.

Me parecieron excelentes la tapa de berberecho y almeja al limón, la tapa de ostras y la tapa de pulpito a la gallega. También excelente el plato de gamba de Roses frita que acaba con un carpaccio también de gamba, el plato de butifarra de bogavante, y las albóndigas de lengua de pato.

De notable alto o muy alto, me parecieron la anguila a la plancha, el cebiche con leche de tigre (aunque no dista del ceviche de cualquier buen peruano de Madrid), el salmonete de roca cocinado en hoja de plátano, la sopa de miso, el lomo alto de vaca gallega, y el resto de tapas.

Bien me pareció el pato pekinés, y el bocado de atún.

Y no me gustó, como único plato de todo el menú, el cochinillo ibérico. No me gustó porque uno se espera un cochinillo al estilo el de COQUE de Mario Sandoval y lo que realmente se encuentra es un cochifrito que acaba resultando demasiado pesado. No estaba malo de sabor ni mucho menos, pero a mi así de frito no me gusta porque no sabe a auténtico cochinillo.

Llegados a este punto, y antes de empezar los postres, uno ya llega bastante bastante lleno, casi en el límite. Pues bien, en vez de traer como primer postre algo ligero y refrescante, te traen una copa, irish coffe lo llaman, de foie y queso fresco. Sí sí amigos, ¡foie de postre! Y no una cucharadita sino 4 o 5 que acaban dejándote KO. Joder, no entiendo como un plato tan rico lo destrozan poniéndolo de primer postre. Este plato servido al principio de la comida ganaría mil puntos. Incomprensible.

Muy refrescante, ahora sí, el sándwich de naranja. Este tenía que ser el primer postre!

Delicioso el postre de una especie de oreo al limón.

Y llegamos entonces a lo que en mi opinión fue lo peor de la cena: el postre de spaguetti al pesto. Logrado está logradísimo, de eso no hay duda. Pero meter de postre un plato que sabe a auténticos spaguettis al pesto me parece un desacierto absoluto. En fin, que cada uno tiene su gusto, pero para mí que soy muy dulce y goloso, un menú de este altísimo nivel tenía que acabar con postres refrescantes y postres dulces, y no con foie o pesto.

Finalmente, nos trajeron una pecera llena de petit fours. Una lástima que a esas alturas de la cena creía que iban a tener que llamar a una ambulancia para sacarme de ahí y solo pude probar 2 o 3 que debo reconocer que estaban buenísimos.

Para bajar la cena, y ya solos en el restaurante (sería la 01:30 y ya sabéis que los guiris van a cenar a las 8) tomamos un par de gin tonics a precios de oro. Un monkey 47 (40 € suele costar la botella por ahí) con tónica 1724, la friolera de 20 € y el G’vine, 17 euros.

Respecto a los vinos, precios altísimo como era de esperar. Ya sabéis como me joden los restaurantes con vinos a precios de 45€ para empezar a hablar, vinos que en tienda cuestan 20 € a lo mucho. Nosotros tomamos un riesling Rheinhessen westhofe a 51 € que estaba muy bueno y un priorato Clos cypres a 48 €.

Cuenta final: 448 €, que entre dos sale a 224 € por barba. Para que os hagáis una idea, mi cena en el CELLER DE CAN ROCA del día siguiente, con vinos y gintonics y puros, me salió a 250 € por persona. ¿Solo 25 € de diferencia entre ELS BRANCS y CELLER DE CAN ROCA? Mmmmmmm, perdona pero no.

De todas formas, os aseguro que merece la pena ELS BRANCS pese a ser carísimo pues esa mezcla de comida de altísimo nivel – terraza con vistas al Mediterráneo “casi” no tiene precio.

Sin duda que ELS BRANCS se merece 2 estrellas. U otros no se merecen ninguna. Porque lo que no puede ser es que todos estos platos, toda su compleja elaboración, todo ese menú de 3 horas, todo ese excelente servicio y toda esa espectacular terraza se merezcan iguales estrellas michelín que, por ejemplo, Chirón (Valdemoro), Kabuki (y eso que yo amo kabuki), Skina (Marbella), Casa José (Aranjuez). Sitios donde comes de maravilla, pero coño, no se pueden valorar igual!

Por eso, aunque aquí le de 5 estrellas, cuando lance mi web donde se puntuará del 1 al 11 (el 11 realmente es “10 plus”, es decir, sitios que son lo máximo en la vida como Celler, DiverXo), ELS BRANCS se llevará un absoluto 10.

Dirección:

Web:

Yo pagué: 250 euros€ | Precio medio:

Fecha de la visita:

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